Los mejores consejos para que el gato no pase calor en verano

Si tienes un gato como mascota, seguro que te interesa conocer una serie de consejos para que no pase calor este verano. Del mismo modo que nosotros, los animales domésticos también pueden sufrir deshidratación y un golpe de calor, y esto es justo lo que hay que evitar.

Son muchos los propietarios que creen que cortarle el pelo a su gato cuando suben las temperaturas es una buena idea. Pero nada más lejos de la realidad. Los expertos explican que esto podría traer muchos problemas porque su pelaje les protege de los rayos UVA y UVB del sol, así como de las picaduras de mosquitos.

Agua fresca y limpia

Es fundamental que el animal tenga a su disposición agua fresca y limpia las 24 horas del día. Lo ideal es que la cambies unas tres veces diarias, así que si vas a estar muchas horas fuera lo mejor es que compres un bebedero automático con temporizador para que puedas programarlo.

Pelaje

Hay algo muy importante que debes saber, y es que los perros y los gatos, a diferencia de los humanos, no liberan calor a través de la piel. Las glándulas sudoríparas se encuentran en las almohadillas de las patas. Este es el principal motivo que explica por qué las mascotas lo pasan tan mal cuando las temperaturas son altas.

No, no tienes que cortarle el pelo a tu gato para que no pase calor en verano, pero sí tienes que cepillárselo para eliminar la suciedad acumulada, así como las capas de pelo sobrante. Escoge un cepillo adecuado a la raza del animal y, si tienes cualquier tipo de duda, consúltala con el veterinario.

Ventilación

En este punto los gatos son exactamente igual que nosotros: necesitan una temperatura lo más fresca posible para estar a gusto y no sufrir ningún problema de salud. Por lo tanto, ventila a primera hora de la mañana, y durante el resto del día mantén las personas y las ventanas cerradas.

Cuando hace calor, los gastos están menos activos. Para que no sufra un golpe de calor, procura que tu mascota no haga ejercicio en las horas centrales del día.

Y, por último, no te olvides de prestarle mucha atención para que, ante cualquier signo de que algo no va bien, puedas llevarle rápidamente al veterinario. Los principales signos que alertan de un golpe de calor en gatos son: jadeo, nerviosismo, salivación excesiva, temblores, vómitos y pérdida de equilibrio.